martes, 18 de agosto de 2009

Mi mundo

Llevo un buen rato intentando escribirte algo. No sé si es algo para mí, o una carta para ti.
Quizá sea una despedida...aunque no te alarmes, dudo que así sea. He intentado tantas veces decirte adiós que me resulta paradójico pensar que esta vez sea verdad, además tengo antecedentes...no te puedes ni imaginar cuantas veces he jurado odiarte, ni cuantas me he prometido que esta será la última lágrima, o este el último texto que te escriba, asíque ya no confío en mí. Nunca cumplo lo que me prometo.
La verdad se me hace raro escribirte, creo que lo hago porque sé que nunca lo leerás.
Cada día me haces más daño. Aunque tú no lo sepas me vas destrozando poco a poco, y sin embargo siento que cada día te quiero más. Masoquismo creo que lo llaman. Me he imaginado tantas veces mi vida junto a ti que creo que no aceptaré nunca el que no vaya a ser así. Por ello, hace tiempo, me desterraron a MI MUNDO.
Mi mundo es un sitio en el que nadie puede entrar, es sólo mío. Bueno, convivo con unos cuantos recuerdos y unos pocos de sueños imposibles, ¡ah! Y el otro día también se mudaron una dosis de nostalgia y una pizca de melancolía. No quería dejarles entrar, pero insistieron tanto que no pude decirles que no. También se quiso colar el rencor, pero para él si que no hay hueco.
La verdad esto es un sitio bastante cómodo, pero me gustaría salir de aquí. Hace mucho frío, y mi amiga soledad no me deja en paz. Además huele demasiado a tristeza y las sonrisas se escapan por las ventanas, pero no hay manera de convencer a mi corazón para que me deje marchar. Creo que hasta que no llegue el día en el que apenas me acuerde de tu cara no me dejará irme.
Por eso me gustaría pedirte un favor. Querría que dejaras de visitarme aquí. Aunque creas que no te veo siempre apareces por las noches cuando duermo y alteras mis sueños. Estás presente todo el día, y eso no me deja avanzar.
Sé que lo haces para que no te odie, pero ya te he dicho que nunca lo conseguiré ni aunque me lo proponga, así que ya que no quieres quedarte en mi vida, ni yo tengo fuerzas para echarte, me gustaría que te fueras por tu propio pie.
Eso sí, cuando lo hagas dejaré la puerta entornada, más que nada por si un día decides regresar.


3 comentarios:

galmar dijo...

mi mundo...
suena...
tan bien:) el mundo siempre es grande, abarca y abraza al horizonte, hay un norte, que nos orienta, un sur, para emigrar, el este, por donde sale el sol, y el oeste, si hay suerte, tiene un mar de sábana para dormir y arropar al sol...
tu mundo, aunque no te lo parezca, me ha recordado todo esto (es un mundo de puertas abiertas, por donde todo puede pasar:)

sete dijo...

Tristes novedades..

Angela dijo...

Hay mas mundos, sabes? Cada dia puedes crear uno diferente, y probar. Puedes hacer cosas que nunca hiciste o cosas que siempre quisiste hacer. Puedes intentar que la tristeza y esa "amiga" tuya se vayan. Puedes crearte un mundo a medida Amara, y si ves que no lo consigues, siempre habra alguien que te ayude :)

tequiero!