La fuerza de la amistad

-¿Te has fijado?
-¿En qué?
-En aquella chica.
-Pues no, ¿qué pasa? ¿La conoces?
-No, no la conozco. Aunque sí tengo la sensación de que la he visto en algún otro lugar.
-Bueno, ¿y en qué me tengo que fijar?
-Nada, en que parece triste…
-¿Triste? ¡Si se está riendo!
-Ya, pero fíjate en su mirada, no tiene brillo en los ojos. Y, cuando el resto de la gente no le está mirando, su rostro es serio. Parece pensativa…yo creo que le pasa algo.
-Pues yo no noto nada raro…¡estás paranoica!
-Quizás sea eso…
-Además, ¿a ti que más te da? Si no la conoces de nada… ¡ya se preocuparán de ella sus amigos!
-Ya, pero… ¿y si necesita ayuda? Yo creo que sus amigos no se han dado cuenta… Bueno aunque quizás la chica que está a su lado sí, porque la mira de reojo y pone un gesto como pensando que qué le pasará…
-Creo que has visto demasiadas películas….
-Mira, se han levantado y parece que se van… aunque la chica sigue sentada. Sí, se están despidiendo, pero ella se queda… ¿y si voy a hablar con ella?
-¡Estás loca! Se habrá quedado porque estará esperando a alguien y, además, ¿qué le vas a decir? “¿Hola te estaba mirando y creo que estás triste?” ¡Por dios! Te va a mandar a la mierda. No sé como has podido sacar tantas conclusiones si no la conoces.
-A veces dice más una mirada o un gesto que una larga conversación. Sólo tienes que observar.
-La verdad es que esta conversación me parece estúpida…
-Espera, ahora vengo... voy a hablar con ella
-Pero… ¡anda, haz lo que te dé la gana!





-Hola…
-Hola, ¿te conozco?
-Pues… creo que no, aunque no sé por qué tengo la sensación de que sí, no sé es extraño.
-A mí tu cara no me suena, aunque tu voz sí me resulta familiar…
-¿Sí? Pues no sé…oye… que …es que…¿te pasa algo? ¿Estás bien?
-¿Por qué me lo preguntas?
-No sé, es que me ha parecido q tenías una expresión triste…
-¡Qué va! Si desde que he llegado no he parado de sonreír…
-No sé…tus ojos no acompañan a tu sonrisa. Además el sonreír no quiere decir q estés bien.
-Vaya, veo q eres muy observadora…
-La verdad es que sí… me lo enseñó mi madre.
-No te preocupes, estoy bien, de verdad. Simplemente, es que echo de menos a alguien…
-Quizás sea un poco indiscreta, pero… ¿a quién echas de menos?
-Pues… a una amiga de la infancia. Hace mucho que no sé de ella. Perdimos el contacto y… no sé por qué extraña razón, hoy me he acordado de ella.
-Vaya, lo siento… aunque, esto me parece extraño.
-¿Qué es lo que te parece extraño?
-No sé, ¡todo! Pero sobre todo que en vez de haberme mandado a la mierda por meterme en tu vida, me hayas contado que es lo que te pasaba.
-Me inspiras confianza, es como si te conociera desde siempre. Qué cosas pasan…
-Oye ¿y cómo se llama tu amiga?
-Clara… se llama Clara.
-¿Clara? Oye… ¿tú no te llamarás Laura?
-Sí, ¿cómo lo has adivinado?
-No sé, tienes cara de llamarte Laura. Es broma, es que lo pone en tu colgante…
Anda, deja de estar triste. Seguro q vuelves a ver a tu amiga muy temprano. Además, las cosas siempre ocurren por alguna razón y, si te has acordado de ella será por algo. En fin, me voy que he dejado a mi amiga sola y seguro q se está impacientando. ¡Hasta pronto Laura!
-Gracias. Deberían existir en el mundo más personas como tú.
-¡Qué va! Entonces iríamos apañados ;) Adiós…
-¡Eh! ¡Oye! ¡No me has dicho tu nombre! ¿Cómo te llamas?
-Clara, me llamo Clara…

Hola!!!! Bueno la entrada de hoy es un dialogo que escribi hace bastante teimpo..es un poco raro pero ami me gusta ^^ Espero que a vosotr@s también :)