Entonces apareciste y diste la vuelta a mi mundo. Lo pusiste todo patas arriba y todo cobró sentido de golpe. El día que te conocí me fui a dormir sonriendo y desde aquel día no he dejado de hacerlo. Los sueños dejaron de ser sueños y la realidad empezó a superar todo lo que habría podido imaginar. No me digas por qué, pero sigo teniendo la sensación de que llevaba mucho tiempo esperándote. Me siento en una nube, y cada día más y más feliz. Cada mañana me levanto esperando el momento de volver a verte, y ya no me imagino mi vida sin ti. Sólo necesito uno de tus abrazos para que el tiempo se pare y todo lo de mi alrededor desaparezca, porque entre tus brazos nada más importa. Ahora el mundo me parece menos cruel y me siento fuerte para enfrentarme a cualquier cosa. Lo único con lo que sueño es con seguir sumando minutos, horas, días y meses a tu lado, con seguir construyendo recuerdos y momentos inolvidables que sean sólo nuestros. Nunca me había sentido así, me siento tan enamorada que a veces me da miedo, pero con mirarte a los ojos desaparece y me siento más segura que nunca…Ahora mi mundo eres tú.
Nanananana to me!!! ♥